Hermandad del Santo Via Crucis. Granada

Hay trabajos que trascienden la simple restauración. Obras que, más allá del oro y la madera, llevan consigo historia, devoción y un legado de fe que se transmite en cada pincelada, en cada hoja de oro que se posa con el mayor de los respetos. Así ha sido este proceso de dorado y restauración para la Hermandad del Santo Vía Crucis de Granada, un trabajo que ha sido mucho más que devolverle el brillo a unos candelabros.

Cada una de estas piezas forma parte de la memoria de la hermandad, de esos instantes donde la luz del dorado se entrelaza con la cera encendida, iluminando el camino del Señor por las calles de Granada. Cada curva, cada ornamentación, cada destello reflejado en el oro fino es un testigo de la fe que ha sostenido a generaciones de hermanos y devotos.

La pasión cofrade no se mide en horas de trabajo, ni en capas de bol ni en la meticulosidad de un bruñido. Se mide en la emoción de ver cómo una obra vuelve a nacer, cómo aquello que parecía desgastado por el tiempo recobra su esplendor, como si el mismo espíritu de la hermandad soplara vida sobre la madera y el oro.

Este no es solo un trabajo de dorado, es una promesa cumplida. Es devolverle a la hermandad el esplendor que merece, el honor de ver brillar sus enseres bajo la luz del Viernes Santo, en el recogimiento de su caminar, en la emoción de quienes sostienen su fe en cada paso.

Porque el arte sacro no es solo una técnica, es una vocación. Y en cada candelabro, en cada reflejo dorado que danza entre la luz de las velas, late el alma de un pueblo que nunca deja de soñar con la belleza de su hermandad.

Un renacer dorado para la Hermandad del Santo Vía Crucis de Granada

El trabajo de restauración y dorado de los candelabros de la Hermandad del Santo Vía Crucis de Granada ha sido un proceso minucioso que ha devuelto a estas piezas su esplendor original. Este proceso ha involucrado diversas etapas especializadas en la conservación de la madera y la aplicación del dorado con oro fino de ley, una técnica tradicional en el arte sacro.

1. Restauración del soporte de madera

Las piezas originales de los candelabros, talladas en madera, han sido sometidas a un proceso de consolidación estructural para garantizar su estabilidad. Esto incluye:

  • Limpieza y eliminación de impurezas: Se han retirado restos de suciedad, barnices antiguos y posibles repintes que alteraban la estética de la obra.
  • Reintegración de zonas deterioradas: Se han restaurado partes dañadas utilizando madera de características similares y estucos tradicionales.
  • Aplicación de imprimaciones y aparejos: Se han aplicado capas de preparación a base de bol arménico y cola de conejo, necesarias para la correcta adhesión del dorado.

2. Dorado con oro fino de ley

El proceso de dorado ha seguido la técnica tradicional del dorado al agua, lo que proporciona un acabado brillante y duradero. Los pasos fundamentales han sido:

  • Aplicación del bol: Se ha utilizado bol de distintos tonos (rojo y amarillo) para dar profundidad al oro.
  • Colocación del oro fino: El oro de 23 ¾ quilates ha sido aplicado en finas hojas sobre la superficie previamente preparada.
  • Bruñido con piedra de ágata: Este paso da brillo y realza los volúmenes de la talla, logrando un efecto de lujo y reflejo característico.
  • Envejecimiento y patinado: Para armonizar la apariencia del dorado con la estética barroca de la pieza, se han realizado matizados con técnicas de pátina al óleo y veladuras.
Hermandad del Santo Via Crucis Granada2

3. Resultado final

El trabajo culmina con un acabado impecable que resalta los detalles ornamentales de los candelabros, devolviéndoles su aspecto majestuoso. La recuperación de estas piezas no solo respeta la tradición artística andaluza, sino que también garantiza su preservación para futuras generaciones dentro de la hermandad.

Este tipo de restauración y dorado es un arte en sí mismo, que requiere precisión, paciencia y profundo conocimiento de las técnicas antiguas para lograr un resultado acorde con la solemnidad y belleza del arte sacro.